El Rey Apóstol, un peleador que baja del ring y sigue luchando para crear la Fé
Un tamaulipeco que además de ser sacerdote, es luchador y ha sido productor de televisión.
RÍO BRAVO, Tamaulipas.- Sacado como de un guión de película de Hollywood o renaciendo aquella vieja historia de Fray Tormenta de las décadas de los 80 y 90 en nuestro México; así se puede comparar o hablar de la historia de “Rey Apóstol” un tamaulipeco que ha tomado la decisión de llevar el mensaje de fe, esperanza y de Dios desde un ring de lucha libre y de un altar como Sacerdote.
El Rey Apóstol proviene una dinastía de luchadores como lo son los “Kaomas” y su máscara es un símbolo de su fe: un apóstol con los brazos abiertos, una Biblia y una cruz, adornada con cruces y grecas que representan el camino espinoso hacia Dios.
'Con Dios hay que sufrir, pero se sufre con alegría, porque sabemos que el premio es el cielo,'
Hace unas semanas llego al municipio de Río Bravo, el padre Gustavo Becerra como nuevo Vicario a la Parroquia San Juanita y todo parecía normal para los feligreses y vecinos, hasta que desde las mesas del Café Encinos & Bistro comenzó a sonar el nombre de un peleador de lucha libre conocido como el “Rey Apóstol”, corriéndose la voz en las calles de la localidad, generando asombro y admiración.
“Tenemos en Río Bravo al 'Rey Apóstol' es el nuevo vicario de la Parroquia San Juanita, es el padre Gustavo Becerra quién además de ser sacerdote es luchador” se fueron publicando reacciones en las redes sociales de las familias riobravenses.
Otras publicaciones citan de esta manera:
“Imagínate te confiesas con el y te dice: de penitencia te voy hacer la quebradora”.
“Dios bendiga al padre Gustavo y lo siga llenando de sabiduría”.
Gustavo Becerra, nacido en Matamoros, Tamaulipas, tomo la decisión desde hace años de combinar su apostolado católico con su pasión por el deporte espectáculo.
Después de celebrar las eucaristías y cumplir con sus misión evangélica, el Padre Gustavo Becerra, se quita su sotana y se pone su máscara y el traje de luchador, para subirse al ring y seguir promoviendo desde el mundo del pancracio entre la lona y las cuerdas la fe.
'Así como me tengo que preparar para estar arriba del cuadrilátero, hacer ejercicio, hacer sacrificios, también en la vida espiritual hay que prepararse y disciplinarse,' comenta el padre Becerra. Inspirado por San Pablo, él cree firmemente en 'ahogar el mal a fuerza de bien.'
-San Pablo y San Juan Bosco fueron su inspiración-
Desde joven, Gustavo Becerra se sintió atraído por esas historias de santos y leyendas de héroes, encontrando su inspiración en San Pablo y San Juan Bosco, un santo que realizaba acrobacias y malabares, encontrando en la lucha libre una poderosa forma para acercarse a su comunidad.
En cada función, el padre Gustavo se encomienda a Dios y, al colocarse la máscara “Rey Apóstol”, lo da todo en el ring para continuar promoviendo la fe e inspirar a las nuevas generaciones a amar el deporte.
Además de su labor como sacerdote y luchador, el padre Becerra es licenciado en ciencias de la comunicación y fue productor en el programa matutino 'Buenos Días” de Televisa Matamoros.
La historia del padre Gustavo Becerra es un ejemplo extraordinario de cómo la fe y la pasión pueden combinarse para inspirar y fortalecer a una comunidad.