¿Qué le estamos regalando a los niños?

CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- En un viaje al pasado, recordamos con cariño aquellos días en los que los regalos más anhelados se componían de simples muñecas de trapo, camiones de madera y pelotas que fomentaban la imaginación y el juego activo.

Al respecto Yuritzi Narváez Saldívar, Máster en Psicología Clínica comenta: 'Primero entender que la actividad lúdica se presenta en todas las etapas del ser humano, en especial en los niños, es la ventana que ellos tienen para prepararse para el mundo adulto ya que el cerebro madura a través del juego mediante los diferentes tipos de ellos dependiendo la edad.'

En contraste, los regalos actuales para los niños son, en ocasiones, dispositivos electrónicos como teléfonos inteligentes y tablets. Estos aparatos, si bien ofrecen una variedad de aplicaciones y funciones educativas, también presentan desafíos, como su elevado costo, su propensión a la fragilidad y desde luego su caducidad.

Narváez Saldívar agregó: 'El primer nivel cognoscitivo de juego es el locomotor que inicia en los primeros meses de vida por lo tanto el juguete que mejor se adapta para desarrollar habilidades sensorio motrices es aquel que estimule el movimiento de los músculos de forma repetitiva, es por eso que se puede observar cómo es que en esa etapa los niños prefieren jugar con un vaso que gira por el piso, quitándose la cobija que cubre su cuerpo dando patadas, salpicando el agua mientras se baña dando golpes con sus brazos.'

Existe una creciente preocupación sobre cómo estos dispositivos pueden generar una dependencia desde una edad temprana, limitando las oportunidades de juego físico y la interacción social.

'Los juguetes electrónicos no cumplen con los objetivos del juego en los niños, solo los entretiene. No está mal que los utilicen un rato mientras esperan la cita con el pediatra pero no suplen el juego y lo preocupante es que muchos niños ya no juegan por el uso de pantallas'  explicó Yuritzi Narváez.

La pregunta que surge es si hemos perdido la esencia del juego infantil al enfocarnos en juguetes tecnológicos más caros en lugar de valorar la simplicidad y la accesibilidad de generaciones anteriores. En el equilibrio entre lo tradicional y lo moderno, cabe reflexionar sobre cómo podemos ofrecer experiencias de juego enriquecedoras sin comprometer el desarrollo saludable de la imaginación y la creatividad en la infancia.

En conclusión Yuritzi Narváez sugiere que sea hasta la etapa escolar en la que los niños puedan tener acceso a dispositivos electrónicos considerando lo siguiente: 'En la etapa escolar también se presenta el juego formal donde el niño desarrolla competencias sociales más estructuradas de convivencia y respeto por el seguimiento de reglas, los juguetes que mejor se adaptan a dicha etapa son por ejemplo canicas, lotería, dominó y todos aquellos que requieren el seguimiento de reglas y convivencia.'

¿Son recomendables las tablets o smartphones?

El uso excesivo de dispositivos electrónicos en niños puede tener diversos efectos negativos en su desarrollo. Algunos de los impactos adversos incluyen:

• Retraso en el desarrollo cognitivo: El uso prolongado de dispositivos electrónicos puede estar asociado con un menor tiempo dedicado a actividades que promueven el desarrollo cognitivo, como el juego activo y la interacción social. Esto puede afectar negativamente el desarrollo de habilidades motoras finas, la atención y la concentración.

• Problemas de sueño: La exposición a pantallas antes de dormir puede interferir con el ciclo natural del sueño. La luz azul emitida por las pantallas puede suprimir la producción de melatonina, la hormona del sueño, lo que puede conducir a dificultades para conciliar el sueño.

• Problemas de salud mental: El uso excesivo de dispositivos electrónicos puede contribuir al aislamiento social y a problemas de salud mental, como la ansiedad y la depresión. El acceso a contenidos inapropiados en línea también puede tener un impacto negativo en la salud emocional de los niños.

• Problemas de conducta: El uso de aparatos electrónicos puede estar relacionado con problemas de comportamiento, como la irritabilidad, la impaciencia y la falta de tolerancia a la frustración. Los niños pueden volverse dependientes de los dispositivos para la autorregulación emocional.

• Problemas de salud física: El tiempo prolongado frente a pantallas puede contribuir a problemas de salud física, como la obesidad, debido a la falta de actividad física. Además, la postura inadecuada al utilizar dispositivos electrónicos puede dar lugar a problemas musculoesqueléticos.

En cuanto a la edad recomendada para el uso de dispositivos electrónicos, las pautas varían, pero muchos expertos sugieren limitar el acceso a pantallas en niños menores de 2 años y fomentar un uso equilibrado en edades posteriores.

La Academia Americana de Pediatría sugiere que los niños de 2 a 5 años limiten el tiempo de pantalla a una hora al día de programación de alta calidad, mientras que para los niños mayores de 6 años, se recomienda establecer límites coherentes y garantizar que el tiempo frente a las pantallas no interfiera con otras actividades esenciales para su desarrollo.