Accidente en moto le cambió la vida a Isay, hoy es un artista urbano
Es la historia de Isay, un joven que domina el balón en los semáforos a cambio de monedas, quien busca ganarse el recurso por su capacidad y no por su discapacidad.
CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- El tráfico de la ciudad y los semáforos son, en muchas ocasiones, motivo de estrés y desesperación. Afortunadamente hay escenas que te despiertan la capacidad de asombro y llama tu atención. Este es el caso de Isay, un joven que aprovecha los semáforos en rojo para dominar su balón de futbol. Lo que es de destacar es que, pese a tener una sola pierna, su habilidad lo hace parecer muy sencillo.
¿Cómo perdió su pierna?
Isay tiene 31 años y platica que fue a los 19 cuando perdió la pierna. Era un joven de enorme talento que soñaba con ser futbolista profesional. Un día un amigo se ofreció a darle un aventón en su motocicleta pero lamentablemente sufrieron un accidente. El amigo falleció y él perdió su pierna.
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¿Cómo empezó a dedicarse a esto?
Luego del accidente, tras años de terapia y depresión, y ante la necesidad de salir adelante por él y su familia, a los 25 años decidió salir a la calle para que la gente lo apoyara, pero no por su discapacidad sino por su capacidad, demostrando así que los límites están en la mente. Así lo manifestó Isay Larios:
Yo creo que si quisiera mostrar mi discapacidad, sería más fácil acercarme con la gente en los carros y pedir su apoyo porque de alguna forma es evidente que no tengo una pierna, y yo creo que trato de hacer las cosas inversas, o sea, aunque me falte una extremidad, demostrar algo a la gente.
¿Qué mensaje quiere transmitir con su historia?
El mensaje, dice, es claro: “sin importar los problemas o adversidades no hay que rendirse, todo se puede superar”. Y esto, agregó, es más fácil hacerlo cuando se tiene un motivo. Como en su caso, su esposa y sus hijos: un niño de 6 y una niña de 11.
Siempre yo les doy mensajes de que si les pasa algo que se levanten, a mí me toca caerme y me toca levantarme, siempre les digo que del piso no paso y aquí estoy.
Isay viaja por todo México, cambiando de ciudad por temporadas y su talento le ha permitido mantener a su familia, pero esto no sería posible sin la solidaridad y empatía de la población, a quienes agradece todo el apoyo.
Yo no tengo otra forma de cómo pagarles el apoyo que me brindan. Sólo demostrando esto frente a toda la gente y pues agradecerles el apoyo que me dan, pues pedirle a Dios que los bendiga por el apoyo que me brindan.
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